Lo adelantamos en un artículo anterior: hay una avalancha en el mundo empresarial de migraciones a Office 365. ¿Por qué? Os explicamos nuestra experiencia.

La mayoría de nuestros clientes nos pide la migración del e-mail. Al explicarles las ventajas de pasarlo todo a la plataforma de Microsoft es el momento en el que percibimos entusiasmo. ¡Vamos a ello!

Las migraciones a Office 365 consisten normalmente en agrupar todos los servicios de software que pueda necesitar una organización en una misma plataforma. De este modo, se puede acceder y sincronizar todos los recursos online desde cualquier dispositivo y navegador.

Tenerlo todo agrupado bajo un mismo paraguas tiene infinidad de ventajas a nivel productivo.

Los usuarios se pueden configurar en grupos con distintos permisos para acceder a diferentes partes de una misma intranet (Sharepoint). Así, con una misma estructura de datos (archivos y carpetas), cada usuario o grupo de usuarios tiene capacidades de lectura y edición según los roles asignados. Es decir, un grupo de empleados sólo ve una parte de los archivos de todos los que dispone la empresa.

Además, al operar de esta forma, dos usuarios pueden estar trabajando un mismo documento a la vez. Esto es muy útil ya que acostumbra a haber archivos que son muy usados por varios usuarios; ya sea para editar distintas partes del mismo o para que toda la empresa tenga visible la última versión en tiempo real. Y todo ello con un guardado automático de los archivos e histórico de versiones.

Así, hay que recordar la facilidad de comunicación y de compartir archivos teniendo todos los programas vinculados de esta forma: la compatibilidad es máxima, sencillo y ágil.

También hay que destacar la escalabilidad que permite tanto en crecimiento de usuarios, de necesidades de almacenaje, o de servicios mediante módulos de Dynamics 365 por ejemplo.

Esto último lo dejamos para más adelante, pero imagínate tener un contacto entrado en un programa de correo y poder usarlo como cliente en un módulo de ventas e incluirlo en el de finanzas. Imagínate que además podemos tener estadísticas en tiempo real de todas las interacciones de un mismo cliente en los distintos ámbitos de nuestra empresa. ¿A qué suena bien?

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